México busca responsabilizar a armerías de EE. UU. por tráfico de armas

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha declarado que si Estados Unidos designa a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, su gobierno ampliará la demanda contra los fabricantes y distribuidores de armas estadounidenses. Sheinbaum argumenta que, dado que el 74% de las armas utilizadas por los grupos delictivos en México provienen de Estados Unidos, estas empresas podrían ser consideradas cómplices de terrorismo.

Esta postura surge en respuesta a informes de que el Departamento de Estado de EE. UU. planea clasificar a varios cárteles mexicanos, entre ellos el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel del Noreste, La Familia Michoacana y Cárteles Unidos, como organizaciones terroristas.

Además de estos grupos mexicanos, la designación también incluiría a otras organizaciones criminales de América Latina, como la Mara Salvatrucha (MS-13) de El Salvador, el Tren de Aragua de Venezuela y el Clan del Golfo de Colombia.

México ya ha presentado una demanda internacional contra varios fabricantes de armas estadounidenses, y la posible designación de los cárteles como terroristas podría fortalecer la posición legal de México al argumentar que estas empresas facilitan el acceso de armas a grupos considerados terroristas.

Sin embargo, otros cárteles mexicanos de relevancia no han sido incluidos en la lista de organizaciones terroristas. Entre ellos se encuentran Los Zetas, el Cártel de los Beltrán Leyva, el Cártel de Tijuana y el Cártel de Juárez.

La exclusión de estos grupos ha generado interrogantes sobre los criterios utilizados para la designación y sus implicaciones en la lucha contra el narcotráfico y la seguridad en la región.

Sheinbaum enfatizó que su gobierno está revisando las implicaciones legales de esta posible designación y que, de concretarse, se tomarán medidas adicionales para responsabilizar a las armerías estadounidenses por su papel en el tráfico de armas hacia México.