Suecia entra oficialmente a la OTAN y se da duro gulpe a Rusia

En un evento histórico celebrado en Washington, Suecia se unió oficialmente a la OTAN como su miembro número 32. Esta decisión marca un cambio significativo en la política de seguridad del país escandinavo, que durante dos siglos se mantuvo neutral.

La decisión de unirse a la OTAN fue motivada principalmente por la invasión rusa a Ucrania. En palabras del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, “las cosas buenas ocurren a aquellos que esperan”. El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, entregó los documentos de adhesión durante la ceremonia, destacando que esta medida es una “victoria para la libertad”.

Suecia presentó su solicitud para unirse a la alianza en mayo de 2022, siguiendo los pasos de Finlandia, que se unió en abril de 2023. Con un contingente militar de 50,000 soldados, aproximadamente la mitad de ellos reservistas, Suecia ha expresado su disposición para contribuir con tropas a las operaciones de la OTAN, como en Letonia.

El ingreso de Suecia a la OTAN, junto con Finlandia, implica un cambio geopolítico significativo en la región del mar Báltico. Ahora, Rusia ve el área como rodeada por países miembros de la OTAN, lo que algunos analistas han denominado un “lago de la OTAN”. Este cambio podría tener implicaciones importantes en las dinámicas regionales y en las relaciones con Rusia en el futuro cercano.