Devastador terremoto en Myanmar deja más de 140 muertos y cientos de heridos

Un potente terremoto de magnitud 7.7 sacudió Myanmar el viernes, dejando al menos 144 muertos y más de 730 heridos, según informó la junta militar que gobierna el país. La catástrofe ha generado caos en hospitales y daños estructurales graves en varias regiones, mientras los equipos de rescate trabajan contrarreloj para atender a las víctimas.

En los alrededores de un hospital en la capital, Naipyidó, los heridos llegan en autos, camionetas y camillas. Muchos presentan heridas graves, cubiertos de sangre y polvo. «Nunca vi nada parecido», declaró un médico visiblemente agotado, mientras el personal hospitalario confirmó que al menos 20 personas fallecieron tras su ingreso al centro médico.

Las zonas más afectadas son Sagaing y Meiktila, donde el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) advierte que podría haber miles de víctimas y daños económicos significativos. «Es probable que se produzcan muchas pérdidas humanas y materiales», señala un informe de la agencia Reuters.

El sismo también se sintió en países vecinos como China y Tailandia. En Bangkok, a más de 1,000 kilómetros del epicentro, hubo evacuaciones masivas, suspensión del metro y el colapso de un edificio en construcción, dejando a varios trabajadores atrapados.

El terremoto agrava la crisis en Myanmar, un país ya golpeado por un conflicto armado interno. La junta militar declaró el estado de emergencia en varias regiones y aseguró que se llevarán a cabo operaciones de rescate y asistencia humanitaria. Mientras tanto, la Cruz Roja advirtió sobre daños en carreteras, puentes y presas, lo que podría dificultar aún más la respuesta ante la emergencia.

En Mandalay, la antigua capital real y centro budista del país, se reportaron edificios colapsados y escombros en las calles. Imágenes locales muestran una torre del reloj derrumbada y daños en la muralla del histórico palacio de Mandalay.

Los equipos de rescate continúan la búsqueda de sobrevivientes entre los escombros, mientras la población enfrenta las secuelas de uno de los terremotos más devastadores en la historia reciente del país.