La leyenda de Santa Faustina Martir

La colonial ciudad de Guanajuato está llena de mitos y leyendas, pero una poco conocida es la de Santa Faustina Mártir, una doncella de origen italiano que fue asesinada por su padre al no querer casarse en un matrimonio arreglado y por profesar la religión católica.

Santa Faustina Mártir fue una niña romana de los primeros tiempos del cristianismo que fue sacrificada por su propio padre según cuenta la leyenda, la degolló al descubrir que era católica.

Santa Faustina tiene su altar en la Basílica Colegiada de Nuestra Señora de Guanajuato.

Antes de llegar a Guanajuato, en la época de la colonia, las reliquias fueron adoradas en Piacenza, Italia, de donde era originaria, después estuvieron un tiempo en España de donde fue traída a nuestro país por Antonio de Obregón y Barrera Segundo Conde de Valenciana.

José Eduardo Aréchiga, cronista te la ciudad, cuenta que esta reliquia, se volvió objeto de mucha veneración por ser los restos de algunos de los primeros cristianos del mundo, estos estuvieron en España, llegan a la Nueva España en el año de 1803 y arriban a Guanajuato, empezando el siglo XIX. En Guanajuato tenemos los restos de un esqueleto que se reconstruyó parte de su rostro y manos, además se encuentra también un cáliz que contiene la sangre de santa y mártir.

Desde su llegada a nuestro país, a Santa Faustina se le considera milagrosa y quienes más la buscan son los enamorados, ya que se asegura que ayuda a que los amores imposibles o no permitidos se cumplan, debido a que ella dio su vida por el amor verdadero.

Así que, si alguien tiene un amor complicado, puede acudir a la Basílica de Nuestra Señora de Guanajuato y pedir a Santa Faustina que interceda por esa persona.