La tormenta tropical “Beryl” podría estarse formando en el océano Atlántico

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) ha informado que un sistema tropical sobre el océano Atlántico podría evolucionar a depresión o tormenta tropical este fin de semana. Este sistema se encuentra a varios cientos de kilómetros de las islas de Barlovento.

“Una onda tropical situada a varios cientos de kilómetros al oeste-suroeste de las islas de Cabo Verde sigue produciendo chubascos y tormentas desorganizadas”, señaló el NHC. Actualmente, el sistema avanza en dirección oeste a una velocidad de entre 25 y 32 km/h.

Las probabilidades de que este sistema se convierta en ciclón tropical en las próximas 48 horas son del 40%, consideradas como medias. Sin embargo, la probabilidad aumenta a un 70% en un periodo de siete días, según el NHC.

El Sistema Meteorológico Nacional de México informó que esta baja presión se encuentra aproximadamente a 5,900 km al este de Quintana Roo. De desarrollarse, esta sería la segunda tormenta tropical de la temporada de huracanes del Atlántico y recibiría el nombre de Beryl. La primera tormenta de este año, Alberto, impactó el noreste de Estados Unidos y partes de Texas, dejando un fuerte impacto en México con al menos cuatro muertes.

El NHC también informó sobre otra ola tropical en el oeste del mar Caribe, la cual está generando lluvias y tormentas eléctricas desorganizadas mientras se desplaza hacia el oeste a unos 32 km/h. Aunque existe la posibilidad de desarrollo en el noroeste del mar Caribe o el suroeste del golfo de México, las probabilidades son bajas: un 10% en las próximas 48 horas y un 30% en los próximos siete días.

El NHC anticipa una temporada de huracanes muy activa este año. Las autoridades de Estados Unidos prevén entre 17 y 25 ciclones tropicales con nombre, de los cuales entre ocho y 13 podrían convertirse en huracanes.

En México, las autoridades esperan entre 15 y 18 sistemas con nombre en el océano Pacífico y de 20 a 23 en el Atlántico, según el pronóstico de la Comisión Nacional del Agua y el Servicio Meteorológico Nacional.

Es esencial que las comunidades en las áreas potencialmente afectadas permanezcan alerta y sigan las recomendaciones de las autoridades locales.