Nueva Zelanda propone poner fin a la cuarentena con “burbujas sociales”.

A 5 meses de inicio de la pandemia, muchos países están por salir del confinamiento, sin embargo no conocen a ciencia cierta como salir de este proceso de cuarentena. Salir del aislamiento sin protocolos desarrollados, ha provocado el aumento de casos de coronavirus en varios países que lo han intentado, lo cual provoca una nueva ola, que parece una espiral sin fin.

Una de las estrategias para salir del confinamiento, inició en Nueva Zelanda con las llamadas “Burbujas Sociales”, ya que aunque el país continúa con la recomendación de permanecer en casa y evitar en lo posible interacciones con otras personas, a partir del lunes pasado, las nuevas reglas que entraron en vigencia, autorizan a la población a ampliar su círculo de contactos, es decir, pueden reunirse con un círculo más extendido de su familia.

Esta nueva regla, trae consigo reglas aledañas, por ejemplo, las personas que pertenecen a este nuevo grupo extendido, no pueden pertenecer a otros grupos extendidos, ya que si alguna persona terminara infectada, no sale del mismo círculo y así se podría evitar un contagio masivo.

Esta nueva interacción, podría ser una forma eficiente de relajar el aislamiento, en lugares donde no estén aumentando los contagios.

Mientras que en Nueva Zelanda, la estrategia no fija un número de individuos por “Burbuja Social”, otros países como Inglaterra, fijarán un límite de 10 personas, porque la idea es que se mantengan dentro de un círculo pequeño.

Esta idea ya está siendo considerada en otros países de Europa y en Canadá, que aunque no es una estrategia permanente, sí puede llegar a ser parte de los protocolos de salida de la cuarentena, para evitar segundos brotes de la enfermedad.

¿Crees que esto funcionaría en México? Las familias mexicanas son muy unidas, y muchas podrían sentirse rechazadas en caso de no incluírse dentro de la primer etapa del círculo social. Pero recordemos que todos debemos poner de nuestra parte para terminar con esta pandemia.